domingo, 30 de julio de 2017

Crítica de la película "Spiderman: Homecoming", el regreso del mejor superhéroe Marvel en un filme que no le hace justicia.

Desde que tengo uso de memoria, siempre he amado al adolescente patoso Peter Parker y más aún a su alter-ego en mallas Spiderman, quien objetivamente es el mejor superhéroe de la compañía Marvel (aunque a mí, personalmente, me gusta un poco más Hulk).

Después de la trilogía original de Sam Raimi (que en mi opinión fue una maldita obra maestra cinematográfica, exceptuando quizás la tercera) Spiderman no había tenido una adaptación que le hiciera verdadera justicia, pues para mí Amazing Spiderman fue un tropezón enorme que no supo captar la esencia de nuestro Hombre Araña y acabó siendo un fracaso como película y adaptación.

Sin embargo, en la excelente Capitán América: Civil War, un nuevo atisbo de esperanza surgió. Spiderman hizo una aparición estelar, mostrándose más fiel, más vivo y lleno de energía que nunca.
Desde ese momento, todos hemos esperado esta película con gran interés. ¿Cuál ha sido el resultado final, pues? ¿Han sabido devolverle a la gloria que se merece?

Me duele decir esto, pero desafortunadamente, Spiderman: Homecoming me ha resultado floja y decepcionante. No llega a ser un bodrio completo y es (algo) superior a Amazing; pero desde luego, es de las peores de Marvel Studios. Aquí y ahora, me propongo exponer esta opinión y explicar por qué no creo que sea una buena película.

En los puntos positivos, he de mencionar el genial trabajo de Tom Holland tanto con Parker, como con Spiderman. Ha plasmado a la perfección el personaje y se ha fundido con él. Su interpretación es excelente y sostiene la totalidad del filme. Sin parecer forzado, resulta gracioso, divertido, triste, asustado, inquieto y más, todos estos matices siempre creíbles y en el momento necesario.
Me encanta que al fin tengamos un retrato más fiel en el apartado del instituto: un Peter pringado, un empollón pardillo, reservado y torpe que no para de meter la pata; pero que siempre transmite energía y alegría a pesar de su decadencia, como Spiderman siempre ha hecho. En conjunto, la película crea el aire de inmadurez y desconocimiento del personaje, siendo un aficionado quien a pesar de tener poderes notablemente superiores al resto de los personajes en el Universo Cinematográfico Marvel (quitando a Thor y a Hulk únicamente) no es capaz de imponer lo suficiente ni ser igual de profesional, al fin y al cabo porque es un chavalín. Ha sido un enfoque que encaja en la personalidad de un Spiderman principiante bastante bien.

El resto de secundarios, sin tener demasiada profundidad, restan más que suman. El colega gordito es gracioso, pero a Flash Thompson se lo han cargado como personaje, ahora es asquerosamente patético. El resto carecen por completo de una personalidad definida.

Michael Keaton interpreta muy bien a Adrian Toomes, alias el Buitre, quien no es realmente un villano puro, sino más bien uno del tipo circunstancial que no quiere destruir al héroe, solo desea ser feliz con su familia sin importar los medios que necesite utilizar para conseguirlo. La historia de este personaje no tiene nada especial que le haga destacar, sin embargo, se agradece que nos muestren las explicaciones de por qué los villanos han acabado así. Esto le hace ganar bastantes puntos y automáticamente mejora la calidad para el espectador. Por supuesto, el hecho de que su origen sea simple no daña la trama, ya que en un filme de Marvel no pedimos un nivel como si fuera esto The Wire; solo lo suficiente para que no resulte estúpido o forzado.


Por ahora, todo lo que estoy mencionando es positivo, ¿por qué, entonces, afirmo que la película ha sido una oportunidad desaprovechada?

Comenzamos con los dichosos tráiler. Han dañado de manera irremediable la película. La publicidad y propaganda cada vez son peores: no saben hacer un anuncio sin desvelar la puta trama entera. La esencia de un buen tráiler ha de ser atraer al público mostrando lo menos posible y algún que otro momento de tensión (cliffhanger), pero jamás se ha de mostrar cómo se resuelve esta escena. En esta ocasión, después de ver los 3 minutos de tráiler me conozco la trama completa, la resolución de los momentos más cruciales y toda clase de detalles que no debería saber.
Es cierto, se dejan algún que otro as en la manga para sorprender, sin embargo eso no compensa en lo más mínimo. Mientras estaba viendo la película, en las escenas de tensión e incertidumbre, yo no estaba emocionado porque sabía exactamente cómo iba a acabar.

Y por muy bien construido que esté el protagonista, si el argumento no está a la altura, la película se desinfla igualmente. No han sabido sacar el auténtico potencial que podía alcanzarse. Han fallado a la hora de conducir a Spiderman por los buenos caminos y se han metido en follones innecesarios.

Primero de todo, Spiderman: Homecoming se siente en toda su duración como un simple preludio, una peli de iniciación en la cual no ocurren eventos relevantes. Es cierto que es inexperto y ha de aprender a usar sus poderes, pero no son necesarios 130 minutos para contarnos eso. Con 20 o 30 te basta y el resto del tiempo puede aprovecharse para hacer una película de verdad. Como resultado, el filme tiene momentos de ritmo nulo que se vuelven soporíferos.
Mucho se podrá decir, pero lo cierto es que pasada la mitad de la película seguía sin haber ocurrido nada. Los personajes no han de hacer ninguna elección significativa y no pasan por ninguna senda que los haga cambiar y madurar; en definitiva, empiezan exactamente igual que acaban, por lo que la peli en un todo se siente innecesaria, redundante y vacía. Parece que estamos ante un producto más similar en estructura a un anuncio que a una película. Es como si te prometiera en todo momento "Ya verás, esto en breve va a ser genial" pero no llega a serlo y te deja frío, cabreado.
No hay drama, no apenas hay conflictos morales y no hay espíritu. La trama del amor platónico de Peter no aporta absolutamente nada. No hay química entre los actores y las situaciones están forzadas al máximo, llegando a ser absurdas hasta más no poder.
Creo que esa es la palabra que mejor define Homecoming: nada.

Yo siempre lo digo, "una película tiene que funcionar por sí sola, sin necesidad de sentirse como un paso irrelevante hacia un destino mayor". Esto no significa que no puede dejar al espectador con ganas de ver la siguiente; lo que no debe hacer es funcionar como un simple anuncio de la próxima entrega. En la línea temporal del universo cinematográfico Marvel podríamos saltarnos esta cinta y no nos perderíamos nada en absoluto.


Por último, las escenas de acción y pelea (imprescindibles en un producto de superhéroes Marvel) han sido desastrosas. Los que no la hayáis visto no me creeréis, pero Spiderman no tiene NINGUNA maldita pelea a lo largo de toda la película. Nada que le ponga al auténtico límite, salvo un par de tonterías sin alma. La pelea final contra el villano no es una pelea, es un bodrio con efectos especiales cutres donde no se ve nada entre la puñetera cámara frenética y la oscuridad de la noche; un festival de colores aleatorios y fuego fortuito que no nos hace pasar por ninguna clase de tensión.
El resto de luchas son cortas y por lo general carentes de la esencia Spiderman. Yo quiero verlo enfrentándose a maleantes callejeros, y más tarde, poniendo toda la carne en el asador contra el villano principal. La trilogía original captó eso a la perfección.
Aquí, por el contrario, no lo vemos luchar ni usar todos sus poderes.
Tampoco han sabido captar el estilo de lucha de Spiderman. Es como si no tuviera sentido arácnido, y además, se siente demasiado dependiente del lanzarredes y del traje de Tony. ¿Desde cuándo Spiderman ha necesitado el traje de Tony para hacer algo? ¿Y desde cuando Spiderman es TOTALMENTE INÚTIL sin el lanzarredes? Porque a mí me parece que un tío que puede parar un autobús con sus manos desnudas sin esfuerzo, no tiene necesidad de redes ni trajes súper sofisticados de mierda para cargarse a un par de tontos.
Y lo peor es que sus propios poderes no tienen consistencia. En una escena lo vemos sujetando un puto barco enorme con sus propios brazos; y en otra escena, no es capaz de levantar un par de piedras que se le habían caído encima. ¿Qué?
El guión está lleno de incoherencias de ese estilo (que intenten robar en un avión de mudanza del maldito Tony Stark donde tiene todo el trabajo de su vida y este no se de cuenta; o que el amigo de Peter gordito le hackee el traje de Tony desde un puto portátil de segunda mano).


Así que, ¿veredicto final? He de decir a favor que la mayor parte del metraje no es demasiado aburrida. Eso sí, el resultado te deja completamente indiferente ya que la historia es plana como ella sola y ya tenías la sensación de conocerla por completo por culpa del puto tráiler.

Encima, debido a que se trata de Spiderman, la decepción duele más. Pero por otra parte, siendo como es una película de Spiderman en la que pasas un rato medio decente, no se merece una nota excesivamente baja.
5/10.


SPOILER

Eso sí, la escena final, final; está chula. Ha sido una sorpresa agradable.
Paciencia, chicos.

2 comentarios:

  1. Hace tiempo que no me veo los trailers de nada por eso mismo que dices, lo destripan todo jajaja lamentablemente eso a veces lleva a que me decepcione más imaginando por el título o películas previas que algo será de alguna manera y al final es de otra (véase Thor Ragnarok jajaja)

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    1. En mi humilde opinión, ¡tienes toda la razón! Desde este caso que nos ocupa, intento soportar la tentación y ver la mínima cantidad de tráilers posible. Es muy difícil, no obstante, cuando vas a ver la peli en cuestión merece la pena. ¡Así, conseguiremos evitar que las expectativas sean un factor de peso en el cine! Un saludo :D

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