sábado, 23 de agosto de 2014

Los Mercenarios 3: el regreso del cine de acción a la gran pantalla


He dicho lo mismo un millón de veces, lo sé. Pero he de hacer hincapié en ello porque aún hay por ahí un montón de idiotas sueltos que no se enteran.
Voy a criticar la película por lo que es, y por lo que pretende ser, sin spoilers y al final te daré un pequeño consejo en cuanto si debes ir al cine o no. Los que busquen una crítica en la que me pongo a examinar la profundidad de los personajes, la veracidad del argumento o la calidad de los diálogos que se vayan ya.
Esto es una peli de acción, y se la va a juzgar como tal.
















A mí, personalmente, la segunda me encantó. La considero una obra maestra del cine de acción ochentero, una auténtica joya. Salí tan contento del cine, que sí, me estáis escuchando bien, la ví una segunda vez en la gran pantalla. Por no mencionar la cantidad de veces que la he visto ya en el DVD de mi casa.

No es mejor que la segunda, para nada. El tono ha cambiado mucho, y todo ese humor tanto con las explosivas y comerciales frases, toda esa acción y peleas viendo a los antiguos ídolos, se ha ido en cierto modo. Esta se vuelve más tranquila, más reflexiva intentando dar un mensaje: que ya la mayoría de héroes de acción están viejos y deben dar paso a los nuevos. No funciona del todo, yo lo que espero al ir a una peli de tiros y acción, es tiros y acción.

Hay acción, a ver, tampoco me malinterpretéis, acción de la buena, pero muy poca, en comparación con las anteriores entregas. Y pasa demasiaado tiempo presentándote a los (patéticos) nuevos mercenarios que, en ciertas ocasiones, son un lastre. Esto tiene más consecuencias: que dedica menos tiempo a los mercenarios auténticos, los que nos gustan, como Jason, Lungdren, Crews (que aparecerá, sin exagerar, 5 minutos nada más). Ya sabíamos que Arnold aparece poco, pero Jet Li, cuya aparición en la segunda nos dejó un  vacío, y claro lo esperábamos repartiendo aquí, saldrá a lo mejor otros 5 minutos y no hace NINGUNA escena de artes marciales.
Harrison Ford sustituye al Sr Iglesia (Bruce Willis), y bueno el personaje está bien (también aparece poquillo) pero qué demonios, me habría encantado volver a ver a Willis.
Hay gente que se queja también de las pocas apariciones de Gibson, pero yo reconozco que tampoco me ha disgustado. Un poco más en pantalla, evidentemente, habría ayudado mucho, pero tampoco está del todo mal.
Tenía potencial y yo esperaba una explosión descerebrada de balas y hostias, lo cual no encontré. No me sentí tan satisfecho como con las otras.

Bueno, bueno, ya basta de fallos. Espero que los detractores de la película estén satisfechos ya, porque voy con lo bueno, lo que me ha gustado y lo que finalmente ha conseguido que no piense para nada que he malgastado mi dinero.

No es exactamente lo que venía buscando (una secuela al nivel de la predecesora) pero tampoco está lejos. ¿Tiene acción? Pues claro. Reducida, pero tiene. ¿Me he entretenido? Mucho. ¿Me he reído? También. ¡Y eso es lo más esencial!
Y es que yo con tal de ver a los reyes de acción de los 80 reunidos, pegando tiros y hostias juntos, me conformo. Cada vez que los veía ahí en la pantalla me emocionaba. La primera escena está muy bien hecha, un comienzo bonito para presentarnos a Wesley Snipes, otro de los grandes, que sin duda acaba convirtiéndose en uno de los mejores personajes del film.
Antonio Banderas me ha gustado. No es un papel demasiado difícil, pero lo ha clavado. Se lleva muchos momentos divertidos y no me molesta.
Durante el transcurso de la película también habrá algunas escenillas de acción (con monólogos geniales de Gibson, el cual se convierte en el peor malo al que se hayan enfrentado nuestros mercenarios) pero lo que llevábamos esperando todo el rato llega al final: esa ENORME escena de acción pura y dura con la que finaliza la peli. 25 o 30 minutos de tiroteos sin parar, con al corazón en el puño. Es una maravilla, y lo mejor es que podrás ver a TODOS, sin excepción, TODOS los personajes de la peli dando estopa a diestro y siniestro. Eso, quieras que no, si eres fan de este estilo de cine, te llena. Han sustituido la mayor parte de hostias por más tiros, pero tanto dá. ¿Que quizás en algunos momentos se pasa de irreal? ¡Estamos en el universo de los mercenarios, por amor de Dios! ¡No esperaríais lealtad a las leyes de la física!
Aunque he dicho que se sustituyen casi todas las hostias, tranquilos. No puede haber una peli en la que salga Jason Statham y no dé algún palo a algún ruso de 2 metros. Y por supuesto, no se podía finalizar la cosa sin un cara a cara entre Gibson (sorprendentemente musculoso) y Stallone.

Al terminar te deja buen sabor de boca.
Da lo que promete, no nos engañemos.
Si eres un gran fan de los mercenarios y no puedes esperar a verla, vete al cine, que supongo te gustará.
Si bueno, ni te vá ni te viene, te gusta el cine de acción pero tampoco para tirar cohetes, espera a que salga en DVD.
Si no te gusta el cine de acción ochentera descerebrada, ¿qué haces leyendo esto?

6.75/10.

jueves, 21 de agosto de 2014

Los Guardianes de la Galaxia, poderosos nuevos héroes que arrasan en taquilla


Mucho se está diciendo de este nuevo filme.
"¡Es la mejor película de los estudios Marvel desde Los Vengadores, o incluso mejor aún!" dicen algunos.
"Obra maestra", dicen otros.
Desde luego, ha encantado no solo al público, sino también a la crítica, obteniendo altísimas calificaciones en los sitios web que puntúan películas.
Pues bien, aquí llego yo para disentir. Desde luego no es la mejor producción de Marvel en la gran pantalla, ya que esta empresa tiene peliculones, como "Los Vengadores" (The Avengers) o la excelentísima primera parte de "Iron Man".
Y por favor, la están situando por encima de otras grandes películas de este año y otros, como podría ser "El Amanecer del Planeta de los Simios" por poner un ejemplo, para mí la mejor en lo que llevamos de año.

Sin más preámbulos, comencemos con la crítica:

Siempre he dicho que, en la mayoría de los casos, hay que calificar la película según sus objetivos. A mí, personalmente, me encanta poner altísimas notas a películas estilo "Los Mercenarios", acción al más puro estilo ochentero, pero porque no pretenden ser obras maestras con un gran guión y unos personajes complejos que cambian progresivamente, pretenden hacer que pases un rato de puta madre viendo cómo luchan los tíos musculosos.

Yo creo que este film no es demasiado pretencioso en el sentido de querer ser una obra maestra. Es pretencioso, sí, pero lo que quiere es barrer la taquilla mundial y hacer que pases un buen rato frente a la pantalla haciendo alarde de efectos especiales.

Viéndolo desde esa perspectiva, cumple. No te vas a aburrir, debido a constantes secuencias de acción pura y dura (con un cierto toque de Star Wars), un ritmo frenético, y mucho humor. Desde luego, eso es de las cosas que yo veo más curradas en la película: es un humor fresco, para todos los públicos. La mayoría de las frases y situaciones te harán mínimo esbozar una cálida sonrisa en el rostro. Desgraciadamente, es usado hasta el hastío, se les va de las manos; los chistecitos no están mal de vez en cuando, pero 7 cada minutos se pasarse.


Los personajes principales, los protas, tienen profundidad, amigos. No esperes tampoco calidad de "Breaking Bad" o "The Wire" ni mucho menos, pero en comparación con la extensa mayoría de las anteriores producciones de la empresa, la verdad es que destaca. Cada uno tiene su historia, su personalidad. No les será fácil convivir, y tú no creerás que puedan hacerlo, pero al final, el conjunto se agradecerá. Eso sí, los mejores momentos se los llevan indiscutiblemente Groot (ese árbol viviente que a pesar de decir 3 o 4 palabras en todo el film se gana tu cariño gracias a sus acciones, tan salvajes emocionantes), Drax (con el cual me he llevado una grata sorpresa, ya que no esperaba mucho de Bautista, un simple cachas que luchaba en la WWE, y que ha ofrecido una interpretación buena y muy acorde con el personaje) y Rocket (el mapache que se lleva los mejores chistes).
Luego, Zoe Saldana también está correcta en su papel de Gamora, y Chris Pratt, sobreactúa demasiado y se lleva quizás los momentos más embarazosos del film, pero eso es mayormente culpa del guión, él se ha adaptado bien a lo que le han dado.



Bien, básicamente eso es todo lo bueno: humor, acción, personajes y los efectos especiales. Y claro, con eso, se tiene ya una obra maestra, ¿no? Pues no, porque aún así hay tremendos defectos que estropean bastante el resultado final:

El guión, lo que es su estructura y argumento, no está currado. Desde el principio, te introducen así por las buenas en mundo completamente desconocido, sin tratar de explicarte cómo es, ni las reglas, ni nada. No sabemos si los humanos de la Tierra saben de la existencia de todas estas especies, no sabemos si todas esas personas que aparecen en la peli son humanos, y en el caso de que lo fueran, ¿cómo llegaron allí? También empiezan a introducirte personajes inútiles por un tubo, que no sabes qué pintan ahí ni de qué van. Hemos dicho anteriormente que los personajes principales tienen su personalidad, pero en cuanto a los villanos, meten la pata. No dan miedo, y no sabemos una puta mierda de ellos. Ni motivaciones, ni orígenes, ni nada. Están compuestos de clichés abundantes y frases baratas.

Hay muchas conversaciones que son graciosas. Pero cuando intentan llevar un tema más personal, más triste y serio, se les va de las manos completamente. La primera escena, por ejemplo, es un grandísimo ejemplo: era una maravilla hasta que el primer gilipollas abre la boca.
Hay muchas situaciones muy vergonzosas. Impredecibles, no lo dudo, pero por dios, si el malo está a punto de pulverizarte, ni tú te vas a pones a bailar, ni él se va a detener solo para mirar lo imbécil que eres. Y bueno, eso por decir una, pero la peli contiene unos cuantos momentos mal hechos y escenas patéticas que se suceden una manera rápida y bastante pésima.

Destruye completamente lo que podría haber sido algo grande, hablando de calidad.

En resumen: no es una gran historia llevada con brillantez, pero si lo que quieres es reírte y pasar un rato de acción sin tener que pensar mucho, estás tardando en verla. Si no, no gastes tu dinero, hazme caso. Yo personalmente no estoy decepcionado, esperaba algo más o menos así.

Además, Groot me ha encantado, me he emocionado con ese arbolito del demonio.
Y Drax el Destructor destruye como nadie, y...

Bueno, perdón, que me emociono y me repito.
Cine comercial 100%. Pero da lo que promete.

6,5 / 10








domingo, 10 de agosto de 2014

True Detective, revisión rápida para los que aún no la han visto


Comienzan los créditos iniciales, y ya te estás dando cuenta del calibre que esto va a alcanzar. Puede que sean los mejores que haya visto nunca. Pero, si soy sincero (y es mi intención serlo) no me enganchó desde el principio. Los primeros dos capítulos, concretamente, me parecieron excesivamente lentos y con un guión extraño, pero no en el buen sentido. Evidentemente en el apartado visual se sale absolutamente: una fotografía, unos movimientos de cámara y unas tomas excelentes, dignos de estudio. La constante atmósfera oscura y asfixiante es capaz de rivalizar con las mejores obras del género thriller. Lo primero que me vino a la cabeza: "estos tipos tienen los medios, eso seguro, pero, ¿tienen el poder?". Porque la cosa no avanza, no me encariñé con los personajes, y menos con el plasta de Rust, con sus diálogos metafóricos que no los entiende nadie que los escucha. Sí, todas las palabras están ordenadas perfectamente y registradas en la Real Academia Española (o inglesa o lo que sea, porque la vi en versión original subtitulada), pero madre mía, eso no significa que sea fácil siempre. Me pareció demasiado "cliché detective solitario". Lo dicho, muchos medios, pero poco entusiasmo.

No obstante, poco a poco fui adaptándome, ganando amor por los personajes. Rust y su filosofía "pesimista" comenzaban a calar hondo, la trama me absorbía cada vez más. Nada era lo que parecía, y la investigación tomaba rumbos insospechados, atrayendo mi atención al 100%. Giros constantes, brillantes y con una tensión apabullante asegurada. Al terminar el último episodio, acabas satisfecho. Muy satisfecho; tanto, que te parece haber vislumbrado una obra maestra, sin estar equivocado. Ha merecido la pena esperar.

Si te pasa como a mí, que al principio no le atrae, aguanta los dos (o si eso tres) primeros capítulos, que la cosa mejorará con un ritmo de vértigo a niveles astronómicos. Si te gustó desde el principio, bien por ti, más que has disfrutado.

Eso sí: he de reconocer que la estructura en la que se nos plantea la historia al principio es muy original. Los protagonistas acaban por tener un gran trasfondo y personalidad, eso sin contar con las actuaciones. McConaughey demuestra ser muy camaleónico y genial, un auténtico coloso que solo se puede definir con palabras como "perfección", pero, que Dios me perdone, me quedo con Harrelson. ¿Por qué? Porque como ambas interpretaciones son del mismo calibre escojo al más real. Martin Hart es un detective, pero también es un ser humano. Se enfada, la caga, pide segundas oportunidades, como todos. Rust es un personaje muy poco humano, muy peculiar, sí, con su historia y su trasfondo, pero tiene toques muy típicos y usados de súper-detective marginado con imagen de sabio invencible. Según mi punto de vista él mejora muchísimo al final, cuando se muestra que también es humano, que se puede poner triste y fallar. Acaba siendo un personaje muy bien construido, y que a pesar de que se base en los tópicos, consigue poco a poco evolucionar y fraguarse una personalidad propia dejándote con ganas de más. Indiscutiblemente dos personajes enormes.













La mujer de Hart, Michelle Monaghan, también hace un estupendo trabajo ante la cámara. No se va a hacer pequeña ante estos dos titanes. Estos tres son los más destacables del elenco.

Como ya he dicho, tras el tercer episodio la cosa se pone muy tensa. Vemos que nada era tan bonito como lo pintaban y que el final está cada vez menos claro: puede ocurrir cualquier cosa. Hay secuencias que se te quedan en la retina, un puñetazo visual, acompañado por un guión que se vuelve más solido por momentos. No es solo la profundidad que coge de los personajes, ya es su respuesta al medio que les rodea, y la respuesta del mismo ante ellos. Planteada magníficamente, las sorpresas están a la vuelta de la esquina.

Mención especial a la escena rodada a pulso, sin cortes, durante casi 6 minutos. Es intensa y magistralmente realizada. La mejor escena de la temporada, y puedo afirmar que se encuentra entre las mejores escenas jamás rodadas, tanto en productos cinematográficos como de la pequeña pantalla.
Hay muchas escenas también con tensión y argumento inigualable, pero ninguna como esta.
Os sorprenderéis.

Aunque me temo que no todo son alabanzas. Hay algunos puntos negativos, espinillas clavadas: y es que todo el caso de corrupción que se hallaba detrás queda en menos incluso que un segundo plano y no se ahonda nada al final. El asesino coge más importancia. Éste, es un villano que da muchísimo miedo, mal rollo, el típico que nada más verlo tras de ti te daría un infarto. Sin embargo, no es un excelente villano porque no es nada más que eso, un simple malo. Un tipo muy malo y loco, que hace cosas raras y vive alejado de la sociedad: el más abundante de los arquetipos. En una serie donde todo es tan relativo, y no hay buenos ni malos sino personas distintas con defectos y virtudes, un poco de originalidad se esperaba de él.


Pero en fin, oscura y siniestra obra de arte. Si la nota dependiera del mejor capítulo o de la mejor escena de la serie, esta tendría no uno, sino varios 10, pero hay que valorarla en conjunto, y tanto el principio como pocos momentos puntuales no están al nivel de majestuosidad del resto.
Aún así, se gana un grandísimo 9,5 /10 , y mi completa admiración a todo el equipo.

El mejor episodio de esta primera temporada vendría a ser el cuarto, Who Goes There.
Aunque Form and Void, Haunted Hauses y The Secret Fate of All Life también me han parecido geniales.